CIUDAD DE MÉXICO (Reuters) – México apunta a haber desarrollado una vacuna contra COVID-19 que podría recibir aprobación para uso de emergencia este año, dijo un alto funcionario el martes, un resultado que podría desviarlo de suministros extranjeros poco confiables para su lento programa de vacunación.

La titular del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez-Buylla, dijo en rueda de prensa que la vacuna en desarrollo podría recibir la aprobación en noviembre o diciembre de este año.

Los ensayos clínicos con voluntarios podrían comenzar este mes, según Avimex, la empresa farmacéutica veterinaria que lidera el desarrollo de la vacuna en México.

Si los senderos tienen éxito, la vacuna “Patria” podría ayudar a México y otras naciones en desarrollo que han luchado por asegurar el suministro de vacunas fabricadas en el extranjero que los países ricos han adquirido.

México ha adquirido hasta ahora 16,9 millones de dosis de vacunas para su población de 126 millones, todas de empresas extranjeras como Pfizer-BioNTech, Sinovac, AstraZeneca, CanSino y Sputnik V, según datos del gobierno.

Los costos para adquirir la vacuna de Avimex serían un 800% más bajos que los de las vacunas extranjeras importadas, dijo el gobierno.

México ha reportado 2,286,133 infecciones y 210,294 muertes por COVID-19, la séptima cifra más alta de muertes por habitante en el mundo, según la Universidad Johns Hopkins.

El gobierno dice que es probable que los números reales de casos sean significativamente más altos, y datos separados del Ministerio de Salud sugieren que el número real de muertes puede ser al menos un 60% superior a la cifra confirmada.

ESFUERZO GLOBAL

Patria se está desarrollando con tecnología de la Escuela de Medicina Icahn en Mount Sinai en Nueva York, basada en un virus Newcastle recombinante y una proteína HexaPro SARS-CoV-2 desarrollada por la Universidad de Texas en Austin.

La compañía dijo que utilizó la tecnología existente de su vacuna veterinaria contra la influenza, que ha demostrado ser segura para los humanos, para una vacuna COVID-19 efectiva.

“Después de analizar las plataformas tecnológicas a su disposición, Avimex determinó que un virus recombinante de la enfermedad de Newcastle (rNDV) tiene el potencial de éxito para la vacuna COVID-19”, dijo la compañía en un comunicado.

Otras versiones de la vacuna entrarán en ensayos clínicos como inyecciones en Brasil, Tailandia y Vietnam. Estos tienen la misma composición molecular usando la construcción HexaPro en rNDV, y son desarrollados por los institutos estadounidenses y socios de investigación en esos países.

Sin embargo, la versión de Avimex es la única que se prueba con un virus activo, dijo una portavoz de la compañía. La versión de Avimex también es la única que se está probando como aerosol intranasal y como inyección, dijo.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de México y Conacyt contribuyeron con fondos, dijo Avimex.

La compañía dijo que planea la producción a escala industrial en dos nuevas fábricas tan pronto como tenga resultados exitosos en las fases 1 y 2 de las pruebas.

Por Cassandra Garrison