El presidente electo de Estados Unidos propuso una serie de medidas fiscales para rescatar la economía del vecino país
TIJUANA.- El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, tiene una serie de propuestas para disminuir los efectos de la pandemia en la economía, lo cual será positivo tanto para las familias como para las empresas.
Así lo señaló el abogado fiscalista, Jorge Pickett Corona, quien recordó que durante su campaña Joe Biden habló de un plan de estímulo para luchar contra los efectos de la emergencia sanitaria, que dé continuidad a los incentivos aprobados en los momentos iniciales del Covid-19.
Picektt Corona refirió que en los primeros meses de la crisis, el Congreso de Estados Unidos dio luz verde a una serie de leyes que permitían inyectar 3.4 billones de dólares en ayudas a la economía, incluidos programas de apoyo para empresas, ciudadanos y gobiernos locales.
Entre las propuestas de Biden para los impuestos individuales y empresas están la desgravación fiscal para familias de clase media; ampliar el acceso a créditos fiscales reembolsables para primas de atención médica; ampliar el crédito fiscal por cuidado de niños de 6,800 a 8,000 dólares.
“También propuso aumentar los beneficios fiscales para quienes tienen seguro de cuidados a largo plazo, así como el hacer que el crédito para los primeros compradores de vivienda sea inmediato y permanente; y equilibrar los beneficios fiscales de los planes de jubilación para trabajadores de ingresos bajos y medios”, explicó.
Otras propuestas relevantes del presidente electo, agregó, son el aumentar los impuestos en los niveles de ingresos más altos; colocar un impuesto sobre la nómina del 12.4% sobre los salarios superiores a 400,000 dólates; limitar las deducciones detalladas; gravar las ganancias de capital como ingresos ordinarios al 39.6% para los hogares con ingresos superiores a un millón de dólares y ganancias de capital no realizadas al fallecer.
En cuanto al tema de impuestos a empresas, subrayó el abogado fiscalista, está un plan de impuestos “Made in America”: Crédito fiscal del 10% para empresas que inviertan en revitalizar cerradas o casi cerradas; reequipamiento o ampliación de instalaciones; o devolver los trabajos de producción y/o servicio a los Estados Unidos.
Asimismo, contempla cambios en impuestos corporativos como el aumentar la tasa de impuestos corporativos del 21% al 28%; duplicar la tasa global de ingresos intangibles con bajos impuestos (GILTI) del 10.5% al 21%.
Además, se habla de eliminar la capacidad de las empresas para excluir determinadas propiedades en el extranjero del impuesto y calcular el GILTI en un país por país, en lugar de permitir a las empresas hacer promedios transfronterizos.
Por último, Jorge Pickett mencionó que el plan de Joe Biden precisa fuertes regulaciones y sanciones de inversión para evitar que las empresas cambien de sede en el extranjero para efectos fiscales.