En los primeros días de julio el promedio diario de víctimas se ha incrementado comparado al acumulado del año
TIJUANA. – La incidencia delictiva en Baja California en el tema particularmente de los homicidios sigue en ascendencia, el promedio diario en este 2020 hasta el mes de junio (enero-junio) ha sido de 7.66, una cifra muy alta.
Sólo durante los primeros 16 días del mes de julio del presente año, ya contamos con un promedio diario de más de 8 víctimas de homicidio, señaló Juan Manuel Hernández Niebla, presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública de Baja California (CCSPBC).
Es en el municipio de Tijuana, agregó, en donde la cifra es más alta con 5.53 homicidios diarios de enero a junio, y en los primeros 16 días de julio se incrementó a 6.87.
De igual manera, Mexicali y Ensenada muestran incrementos importantes en el número de homicidios durante el mismo mes de Julio, donde Rosarito y Tecate muestran una tendencia a la baja.
El presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública de Baja California (CCSPBC) hizo hincapié en el aumento evidente de este delito que nos ha mantenido en los primeros lugares a nivel nacional siendo la principal preocupación en la estrategia de seguridad.
Destacó que Baja California requiere una mayor contratación de policías, además de una estrategia más contundente contra este delito de alto impacto.
Hernández Niebla, refirió que, se requiere combatir el fenómeno de la delincuencia y enfocar esfuerzos en las zonas de más alto impacto, de ahí la importancia de aumentar el estado de fuerza de las corporaciones, sobre todo las municipales, también mencionó que es de suma importancia que nuestras policías cuenten con las condiciones laborales emanadas de la Ley de Seguridad Pública del Estado de Baja California en sus artículos 131 y 132.
Reiteró su solicitud a cada uno de los municipios del estado para reglamentar a través de sus cabildos, prestaciones y presupuestos correspondientes que permitan tener más y mejores policías.
Finalmente, invitó a los ayuntamientos a trabajar de manera coordinada con los órdenes de gobierno para implementar el modelo nacional de policía y justicia cívica de acuerdo a los lineamientos del Secretariado Ejecutivo Nacional de Seguridad Pública.